‘Vivir plenamente hacia lo interior igual que hacia lo exterior, no sacrificar nada de la realidad externa en beneficio de la interna y viceversa.’
(Etty Hillesum)

El sentido de las cosas...

Estos días he estado enfrascada dando forma a SINGULARES.
Mientras iba montando muebles y hablando con la compañía electrica, me fue llegando el eco de lo convulso que anda el mundo y de la mala situación económica de gente muy querida para mí.
Sin casi darme cuenta, ese eco fue haciendo mella en mi estómago hasta que un día paré y lo reconocí, es el miedo.

El miedo pudo conmigo unos días.
Fueron días en los que el deseo se desdibujó y casi pierdo el contacto con el sentido de lo que estaba creando.
Con ese machaque de fondo, parecía estar creando algo abstracto, pesado, casi ajeno.

Pero duró poco.
Este fin de semana volví a encon- trarme con los dos grupos del seminario 'Lo personal es Político'.
Eso bastó para recobrar el aliento y notar la plenitud del sentido en mi piel.
Fue solo un clic en el que todo volvió a su lugar.
Recobrar contacto con el sentido, escuchar el deseo, tomarme en serio, me permitió quitarle fuerza al miedo y situarlo en un lugar más sereno, justo allí donde puedo mantener la cordura y la creatividad.
Ha sido un descubrimiento para mí: escuchar y tocar el sentido que doy a las cosas que hago es lo que me da fuerzas y lo que me permite mirar el miedo sin aprisionarme por él, sin que éste se apodere de mí.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡qué guapa!, qué armonía en singulares...
un beso, juan