‘Vivir plenamente hacia lo interior igual que hacia lo exterior, no sacrificar nada de la realidad externa en beneficio de la interna y viceversa.’
(Etty Hillesum)

Quitar capas a la cebolla.

Cada vez me entristezco más cuando veo que los discursos bien armados se superponen al sentir, experiencia, deseo y necesidad de quien habla.
Lo que quiero decir es que cada vez me canso más cuando, después de una charla, sólo he sido capaz de captar el discurso que alguien me cuenta, pero no he sabido ver y sentir a quién lo cuenta.
Me duele, cuando queriendo explicar mejor una idea, me olvido de lo fundamental, de cómo vivo y siento eso que digo y me veo desarrollando un pensamiento que se me escapa, me aleja de mí.
Me apena todo esto porque, incluso en esos momentos en los que hay sintonía en los discursos, he palpado lo lejos que puedo estar del otro o de la otra, he sentido lo fácil que es dejarnos de VER.
Por todo ello, cada día se me hace más fuerte la necesidad de entablar relaciones en las que podamos ir quitando capas a la cebolla y, desde ahí, relacionarnos con lo que nos hace palpitar.
Y lo que me hace palpitar me permite dejar de atrincherarme en el pensamiento para dar vida al pensamiento

1 comentario:

orlanda dijo...

me encanta, Graciela.

besitos