Ella está convencida que dejar que las personas inculpadas se puedan sentar cuando se les toma declaración mejora sustancialmente la tarea de impartir justicia.
En su blog, ella nos habla de las respuestas que ha obtenido cuando, en algunas ocasiones, ha comentado esta idea a alguna jueza o a algún juez. Las resistencias que le han manifestado dan cuenta de que este gesto lleva consigo toda una revolución.
Manuela Carmena |
Yo era una chica que poco sabía de lo que se cocía en el mundillo judicial, pero sentí que esta mujer hablaba de algo que yo sí había experimentado y que, por tanto, tenía para mí veracidad. Ella me explicó que es fundamental desprenderse del lenguaje que se usa en los juzgados para dar paso a otro que sea más intelegible para las mujeres y los hombres de a pie.
Mientras me acordaba de todo esto, leí este artículo de Olga Rodríguez en el que habla de la necesidad de no olvidarse de que la empatía, la escucha y el contacto con la calle son herramientas fundamentales para hacer un periodismo que realmente de cuenta de lo que pasa, de lo que nos pasa.
Ella también propone pequeños gestos que, hoy por hoy, son toda una revolución.
Ellas, con sus gestos, abren puertas para que sean la relación, la escucha y el amor por la verdad, y no el poder o el dinero, lo que nos guíe. Y esto, insisto, es toda una revolución.
1 comentario:
comulgo con esa idea: lo revolucionario está en los gestos.
Un abrazo y feliz año!!
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